Esquizofrenia

Se sospecha que en la esquizofrenia existe una inflamación crónica a nivel cerebral.  Las alteraciones de la microbiota intestinal y del sistema inmunitario podrían estar implicadas.

Fecha de publicación 15 Octubre 2020
Fecha de actualización 28 Octubre 2021
Actu GP : Schizophrénie et microbiote : un lien confirmé ?

Acerca de este artículo

Fecha de publicación 15 Octubre 2020
Fecha de actualización 28 Octubre 2021

La esquizofrenia afecta aproximadamente al 0,7 % de la población mundial. Esta enfermedad psiquiátrica se caracteriza por la aparición de delirios y alucinaciones, aislamiento social y alteraciones psíquicas. Con más frecuencia se declara en adolescentes y adultos jóvenes de entre 15 y 25 años.

¿Implicación del eje intestino-cerebro?


La esquizofrenia a menudo viene acompañada por trastornos gastrointestinales. En efecto, el riesgo de aparición de enfermedades psiquiátricas como la esquizofrenia está relacionado con una inflamación crónica del intestino que implica al sistema inmunitario. Su origen podría ser un desequilibrio de la microbiota intestinal (flora intestinal) que favorecería esta inflamación. Se han encontrado alteraciones de la microbiota en pacientes esquizofrénicos, asociadas también a un aumento de la permeabilidad del intestino (bacterias y otras sustancias que pasan al torrente sanguíneo a través de la pared intestinal). Estos estudios sugieren la existencia de una función clave del eje intestino-cerebro en el desarrollo de la enfermedad.

Actuar sobre la composición de la microbiota


A partir de estos resultados, surgen pistas de prevención y de tratamiento: reequilibrar la microbiota para reducir la inflamación crónica. Los estudios han demostrado que la administración de probióticos podría tener propiedades antiinflamatorias alterando la respuesta inmune. Sin embargo, hasta el día de hoy, ningún tratamiento de ese tipo ha podido demostrar su eficacia sobre la esquizofrenia.

Bibliografia

Inserm. Schizophrenie, dossier d'information réalisé avec Marie-Odile Krebs, Mai 2014

Severance EG, Gressitt KL, Stallings CR, et al. Discordant patterns of bacterial translocation markers and implications for innate immune imbalances in schizophrenia. Schizophr Res. 2013;148(1-3):130-137.

Ellul P, Fond G, « Focus sur la schizophrénie : infections, auto-immunité et dysbiose intestinale », L'information psychiatrique, 2016/10 (Volume 93), p. 797-802.

Sherwin E, Sandhu KV, Dinan TG, Cryan JF. May the Force Be With You: The Light and Dark Sides of the Microbiota-Gut-Brain Axis in Neuropsychiatry. CNS Drugs. 2016;30(11):1019-1041.

Nemani K, Hosseini Ghomi R, McCormick B, et al. Schizophrenia and the gut-brain axis. Prog Neuropsychopharmacol Biol Psychiatry. 2015;56:155-160.

Severance EG, Yolken RH, Eaton WW. Autoimmune diseases, gastrointestinal disorders and the microbiome in schizophrenia: more than a gut feeling. Schizophr Res [Internet]. Elsevier B.V. 2014.

Severance EG, Prandovszky E, Castiglione J, Yolken RH, et al. Gastroenterology issues in schizophrenia: why the gut matters. Curr Psychiatry Rep. 2015 ; 17(5):1–10.

Caso JR, Balanzá-Martínez V, Palomo T, et al. The Microbiota and Gut-Brain Axis: Contributions to the Immunopathogenesis of Schizophrenia. Curr Pharm Des. 2016 ; 22(40):6122-6133.

Dickerson FB, Stallings C, Origoni A, et al. Effect of probiotic supplementation on schizophrenia symptoms and association with gastrointestinal functioning: a randomized, placebo-controlled trial. Prim Care Companion CNS Disord. 2014;16(1):PCC.13m01579.

Joseph J, Depp C, Shih PB, et al. Modified Mediterranean Diet for Enrichment of Short Chain Fatty Acids: Potential Adjunctive Therapeutic to Target Immune and Metabolic Dysfunction in Schizophrenia? Front Neurosci. 2017 Mar 27;11:155.

Tomasik J, Yolken RH, Bahn S, et al. Immunomodulatory Effects of Probiotic Supplementation in Schizophrenia Patients: A Randomized, Placebo-Controlled Trial. Biomark Insights. 2015 Jun 1;10:47-54.