Microbiota paterna perturbada: bebés con mala salud
Los ratones macho que sufren un desequilibrio de la microbiota intestinal en el momento del apareamiento tendrían una descendencia con graves problemas de salud. Este es el sorprendente resultado de un estudio publicado recientemente en la prestigiosa revista Nature.
- Descubrir las microbiotas
- Microbiota y trastornos asociados
- Actuar en nuestras microbiotas
- Publicaciones
- Acerca del Instituto
Área para profesionales sanitarios
Encuentra aquí tu espacio dedicadoen_sources_title
en_sources_text_start en_sources_text_end
Acerca de este artículo
¿Debería un hombre que desee tener hijos posponer la fecha de la concepción si se le hubieran recetado antibióticos susceptibles de provocar una disbiosis intestinal?
Es muy posible, según un nuevo estudio que, por una vez, pone de relieve la responsabilidad de los hombres en la salud futura de su descendencia. 1 En este estudio, realizado en ratones, se demuestra que los machos que sufren disbiosis en el momento del apareamiento tienen una descendencia con mala salud. Afortunadamente, cuando la microbiota se reequilibra, esta transmisión deja de producirse.
Efectos transgeneracionales de la disbiosis intestinal
Para llegar a este descubrimiento, investigadores del Laboratorio Europeo de Biología Molecular de Heidelberg 2 y Roma expusieron ratones macho a 6 semanas de antibióticos. El objetivo era inducirles una (sidenote: Disbiosis La disbiosis no es un fenómeno homogéneo ya que varía en función del estado de salud de cada individuo. Se define generalmente como una alteración de la composición y funcionamiento de la microbiota, provocada por un conjunto de factores ambientales y relacionados con el individuo, que alteran el ecosistema microbiano. Levy M, Kolodziejczyk AA, Thaiss CA, et al. Dysbiosis and the immune system. Nat Rev Immunol. 2017;17(4):219-232. ) . A continuación los aparearon con hembras sanas y las camadas se analizaron al cabo de 3 semanas.
Resultado: en comparación con la descendencia de padres sin disbiosis (controles), las crías de ratón nacidas de padres «disbióticos»:
- tenían un menor peso al nacer (factor de riesgo de enfermedades como la diabetes),
- sufrían un mayor retraso en el crecimiento,
- presentaban una tasa de mortalidad más elevada en los 2 primeros meses.
Para encontrar una explicación a estos sorprendentes resultados, los científicos analizaron el aparato reproductor de los machos tratados con antibióticos.
Impacto directo sobre el desarrollo de la placenta
Observaron que sus testículos tenían un tamaño y un recuento de espermatozoides reducidos y mostraban cambios hormonales y metabólicos significativos. Por su parte, los espermatozoides presentaban diferencias en determinadas moléculas implicadas en el desarrollo de la placenta.
Estos datos demuestran que la microbiota y las líneas germinales (las células que se transforman en espermatozoides) se comunican entre sí y que, por tanto, existe un «eje intestino-espermatozoides».
Al analizar las placentas de las hembras apareadas con machos disbióticos durante la gestación, los investigadores observaron:
- una mala vascularización placentaria que podría explicar ciertas anomalías en la descendencia;
- la presencia de marcadores similares a los de la «preeclampsia», una afección vinculada a un desarrollo anómalo de la placenta, responsable del retraso del crecimiento intrauterino.
La fertilidad en caída libre en todo el mundo
Malos tiempos para la fertilidad… Entre 1973 y 2018, la concentración media de espermatozoides en los hombres pasó de 101 a 49 millones por mililitro de esperma a nivel mundial, es decir, una reducción de casi el 50 % en 50 años. 3
Se calcula que el ritmo de descenso se habría duplicado a partir de principios de la década de 2000 hasta alcanzar el 2,64 % anual, y, contrariamente a lo que podría pensarse, los países del Norte no son los únicos afectados. Sudamérica y África experimentarían también un descenso de la fertilidad de la misma magnitud.
Se cree que la exposición a sustancias como los bisfenoles (A o S), los ftalatos, los parabenos y el paracetamol serían causas importantes de este deterioro. 4 ¡Una época turbulenta para el eje intestino-espermatozoides!
¿Hacia un embarazo mejor?
Es la primera vez que se demuestra en los mamíferos el efecto de la microbiota sobre el aparato reproductor masculino.
¿Existe también un eje intestino-espermatozoides en los seres humanos? De momento, nada permite afirmarlo, por lo que habrán de realizarse nuevos estudios.
Dado que nuestros estilos de vida son susceptibles de provocar disbiosis (mala alimentación, contaminación, fármacos, etc.), la prueba de la existencia de dicho eje podría abrir la puerta a enfoques innovadores para garantizar una mejor salud reproductiva y embarazos óptimos.