Sentirse bien en su propia piel... y con su propia microbiota cutánea
¿Y si el secreto de nuestro bienestar se ocultara en nuestra piel? Un estudio británico pionero sugiere que existe un vínculo entre la microbiota cutánea y el equilibrio emocional. Aparentemente, las personas con una mayor abundancia de Cutibacterium sienten menos estrés y son más felices.
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Acerca de este artículo
De ahora en adelante, ¿tendremos que decir «me siento bien con mi propia microbiota cutánea ”?
en lugar de «me siento bien en mi propia piel»? Esto es lo que parece indicar un estudio de 53 británicos con una edad media de 63 años, que establece un vínculo entre el bienestar psicológico y los microorganismos que habitan nuestra piel, más concretamente la piel de la cara, el cuero cabelludo, los antebrazos y las axilas, Esta investigación arroja luz sobre un sistema de interacciones entre la piel y el cerebro, que es comparable al conocido eje intestino-cerebro.
¿Más Cutibacterium significa más felicidad?
El estudio muestra por primera vez una mayor abundancia de determinados géneros bacterianos en los participantes que se sienten más cómodos con su propio cuerpo, tanto en términos de bienestar general como de la zona de piel en cuestión. La bacteria cutánea más frecuente entre los británicos que se sienten mejor consigo mismos es (sidenote: Cutibacterium Género bacteriano cuya clasificación ha cambiado considerablemente en los últimos años (hasta 2016, se denominaba Propionibacterium). Este género comprende varias especies, entre las cuales figura la famosa C. acnes (un patógeno oportunista implicado en el acné y las infecciones de prótesis mamarias, prótesis de hombro, etc.), sin olvidar C. avidum, C. granulosum, C. namnetense y C. humerusii. Ahle CM, Feidenhansl C, Brüggemann H. Cutibacterium acnes. Trends Microbiol. 2023 Apr;31(4):419-420. ; CTCB ) . Si tiene más Cutibacterium en la cara, es probable que no esté muy estresado. Si sus axilas están repletas de Cutibacterium, lo más probable es que esté de buen humor con un bajo nivel de estrés. Por el contrario, una menor abundancia de esta bacteria podría contribuir a trastornos como el estrés, la ansiedad o la depresión.
Este descubrimiento no deja de ser algo sorprendente: lo primero que viene a la mente acerca de Cutibacterium es la imagen de C. acnes y las pesadillas de la pubertad. más que la serenidad de los ancianos británicos. Esta bacteria también podría contribuir a la salud de la piel utilizando su capacidad para transformar el sebo en ácidos grasos libres para repeler los agentes patógenos y regular la acidez cutánea.
Efectos de Cutibacterium en función de la zona del cuerpo
- Cara: las personas con más Cutibacterium en la cara sienten menos estrés.
Axilas: una mayor abundancia de esta bacteria está relacionada con un mejor estado de ánimo y una reducción del estrés.
Antebrazos: una mayor abundancia de Cutibacterium en esta zona se asocia a una mayor satisfacción con su propia piel.
¿Causa o consecuencia?
Sin embargo, la pregunta central sigue sin respuesta: ¿es la presencia de Cutibacterium una causa o una consecuencia del bienestar? En otras palabras, ¿es la presencia de Cutibacterium lo que nos hace felices, o es nuestro bienestar lo que atrae la bacteria a nuestra piel? ¿O son ambos el resultado de un tercer factor común (por ejemplo, estilo de vida, deporte, dieta)?
Es imposible sacar conclusiones por el momento. Sabemos que la piel y la microbiota cutánea proporcionan a nuestro organismo una barrera protectora que repele los agentes patógenos y nos ofrece seguridad y tranquilidad. Por el contrario, se ha demostrado que el estrés, la ansiedad o la depresión pueden repercutir en nuestra piel, provocando la aparición de trastornos cutáneos como eccema (o dermatitis atópica), psoriasis, acné, o mal olor axilar.
17% Solo el 17% de las personas encuestadas declaran que saben de forma precisa lo que es la microbiota cutánea. ²
Todos hemos oído hablar del eje intestino-cerebro, pero ahora surge el eje bidireccional piel-cerebro, en el que la primera influye en el segundo y viceversa. Por primera vez, se ha establecido una relación entre la microbiota cutánea y el bienestar psicológico. Razón de más para que la investigación (sidenote: Psicodermatología La psicodermatología es un campo relativamente nuevo de la medicina que se centra en las interacciones entre la mente y la piel. El tratamiento de los trastornos psicodermatológicos se centra en mejorar la función, reducir el sufrimiento físico, diagnosticar y tratar la depresión y la ansiedad asociadas a las enfermedades cutáneas, luchar contra el aislamiento social y mejorar la autoestima del paciente. Para tratar trastornos psicocutáneos se recurre a intervenciones farmacológicas y psicológicas. Profundizar Jafferany M, Franca K. Psychodermatology: Basics Concepts. Acta Derm Venereol. … ) profundice en las bacterias implicadas y sus posibles efectos en nuestra salud cutánea y general.
Seca, húmeda o grasa: cada zona de piel tiene su propia microbiota
La piel suele ser demasiado seca en las manos –a tal punto que la tenemos que hidratar a lo largo de todo el invierno– mientras que es húmeda en las axilas, los pliegues (codos, parte posterior de la rodilla) o la zona inguinal. Además, hay una tercera variante: la piel grasa, característica de ciertas zonas de la cara, el pecho o la espalda.
Existen pues tres entornos (seco, húmedo, graso), en los que viven tres microbiotas distintas, adaptadas a las características específicas de cada uno de ellos.
Cabe notar que la microbiota cutánea también varía en función de la profundidad, desde la epidermis (capa superficial) hasta la hipodermis (capa más profunda situada debajo de la dermis): cuanto más profundo, menos bacterias hay y más se parecen de una persona a otra.