Testimonios de pacientes, herramienta de ayuda al diagnóstico, curso de formación certificado, infografía, artículos, etc. Con motivo del mes de concienciación sobre el síndrome del intestino irritable (SII), el Biocodex Microbiota Institute pone a disposición de los profesionales sanitarios y del público general una gran variedad de herramientas y contenidos innovadores que ayudan a comprender mejor esta enfermedad y su relación con la microbiota.
Informar y educar para mejorar el diagnóstico. De acuerdo con su misión de concienciación sobre la importancia de la microbiota para la salud, el Biocodex Microbiota Institute se moviliza en abril –mes de concienciación sobre el síndrome del intestino irritable– y produce contenidos exclusivos dirigidos a los profesionales sanitarios y al público general.
Educación y formación de los profesionales sanitarios
Curso de formación certificado sobre el SII, infografía para compartir con los pacientes, vídeo de experto, dossier temático, últimas noticias científicas... El Biocodex Microbiota Institute pone a disposición de los profesionales sanitarios herramientas y contenidos personalizados que les permitirán mejorar su práctica diaria y convertirse fácilmente en expertos del SII.
Una guía para mejorar el diagnóstico del SII
Aunque el SII afecta al 10% de la población mundial, hasta el 75% de las personas que padecen esta enfermedad no han sido diagnosticadas. La mayoría de los pacientes han tenido un itinerario asistencial caótico, marcado por errores de diagnóstico, falta de información fiable, intentos terapéuticos fallidos, cambios de dieta inoportunos o incluso peligrosos, etc. Ante esta situación, tres gastroenterólogos de fama mundial (el Profesor Jean-Marc Sabaté, el Profesor Jan Tack y el Doctor Pedro Costa Moreira) elaboraron, con el apoyo del Biocodex Microbiota Institute, una guía para mejorar el diagnóstico del SII. Esta innovadora herramienta, fácil de usar y enfocada en la práctica, propone una guía que facilita el establecimiento del diagnóstico diferencial (criterios de diagnóstico, subtipos de SII, lista de signos de alarma, etc.) y mejora la comunicación con los pacientes. Esta herramienta existe en tres formatos diferentes y puede descargarse en la página web del Biocodex Microbiota Institute dedicada a los profesionales sanitarios.
Vivir con el SII: testimonios de pacientes
Se llaman Aline, Jennifer y Mihai. Los tres padecen el síndrome del intestino irritable y hablan abiertamente de cómo la enfermedad ha cambiado sus vidas. Con motivo del mes de concienciación sobre el SII, el Biocodex Microbiota Institute lanza «Patient stories», una serie de vídeos que presentan testimonios de pacientes con enfermedades crónicas. Los primeros episodios de la serie se han realizado con el apoyo de la APSSII (asociación francesa de pacientes con el síndrome del intestino irritable) y están dedicados al SII
Pueden consultarse online en la página web del Biocodex Microbiota Institute dedicada al público general:
El síndrome del intestino irritable, poco conocido del público general, frecuentemente diagnosticado con retraso por los profesionales sanitarios y a veces mal comprendido por los propios pacientes, es una enfermedad crónica compleja que plantea un problema de salud pública. Con esta campaña de concienciación de 360°, el Biocodex Microbiota Institute pretende movilizar a todas las partes implicadas (no solo a los pacientes y profesionales sanitarios sino también a los cuidadores, público general y autoridades sanitarias) para mejorar la comprensión de la enfermedad y dar a conocer los últimos adelantos de la investigación que apuntan al papel de la microbiota intestinal.
«Hay que ser positivo, pero continuar investigando».
Jennifer, una paciente con SII
Acerca del Biocodex Microbiota Institute
El Biocodex Microbiota Institute es un instituto científico internacional cuyo objetivo es la promoción de la salud a través de la comunicación sobre la microbiota humana. Para cumplir su misión, se dirige tanto a los profesionales sanitarios como al público general para mejorar la concienciación sobre el papel central de este órgano aún mal conocido.
Testimonios de pacientes, herramienta de ayuda al diagnóstico, curso de formación certificado, infografía, artículos, etc. Con motivo del mes de concienciación sobre el síndrome del intestino irritable (SII), el Biocodex Microbiota Institute pone a disposición de los profesionales sanitarios y del público general una gran variedad de herramientas y contenidos innovadores que ayudan a comprender mejor esta enfermedad y su relación con la microbiota.
Informar y educar para mejorar el diagnóstico. De acuerdo con su misión de concienciación sobre la importancia de la microbiota para la salud, el Biocodex Microbiota Institute se moviliza en abril –mes de concienciación sobre el síndrome del intestino irritable– y produce contenidos exclusivos dirigidos a los profesionales sanitarios y al público general.
Educación y formación de los profesionales sanitarios
Curso de formación certificado sobre el SII, infografía para compartir con los pacientes, vídeo de experto, dossier temático, últimas noticias científicas... El Biocodex Microbiota Institute pone a disposición de los profesionales sanitarios herramientas y contenidos personalizados que les permitirán mejorar su práctica diaria y convertirse fácilmente en expertos del SII.
Una guía para mejorar el diagnóstico del SII
Aunque el SII afecta al 10% de la población mundial, hasta el 75% de las personas que padecen esta enfermedad no han sido diagnosticadas. La mayoría de los pacientes han tenido un itinerario asistencial caótico, marcado por errores de diagnóstico, falta de información fiable, intentos terapéuticos fallidos, cambios de dieta inoportunos o incluso peligrosos, etc. Ante esta situación, tres gastroenterólogos de fama mundial (el Profesor Jean-Marc Sabaté, el Profesor Jan Tack y el Doctor Pedro Costa Moreira) elaboraron, con el apoyo del Biocodex Microbiota Institute, una guía para mejorar el diagnóstico del SII. Esta innovadora herramienta, fácil de usar y enfocada en la práctica, propone una guía que facilita el establecimiento del diagnóstico diferencial (criterios de diagnóstico, subtipos de SII, lista de signos de alarma, etc.) y mejora la comunicación con los pacientes. Esta herramienta existe en tres formatos diferentes y puede descargarse en la página web del Biocodex Microbiota Institute dedicada a los profesionales sanitarios.
Vivir con el SII: testimonios de pacientes
Se llaman Aline, Jennifer y Mihai. Los tres padecen el síndrome del intestino irritable y hablan abiertamente de cómo la enfermedad ha cambiado sus vidas. Con motivo del mes de concienciación sobre el SII, el Biocodex Microbiota Institute lanza «Patient stories», una serie de vídeos que presentan testimonios de pacientes con enfermedades crónicas. Los primeros episodios de la serie se han realizado con el apoyo de la APSSII (asociación francesa de pacientes con el síndrome del intestino irritable) y están dedicados al SII
Pueden consultarse online en la página web del Biocodex Microbiota Institute dedicada al público general:
El síndrome del intestino irritable, poco conocido del público general, frecuentemente diagnosticado con retraso por los profesionales sanitarios y a veces mal comprendido por los propios pacientes, es una enfermedad crónica compleja que plantea un problema de salud pública. Con esta campaña de concienciación de 360°, el Biocodex Microbiota Institute pretende movilizar a todas las partes implicadas (no solo a los pacientes y profesionales sanitarios sino también a los cuidadores, público general y autoridades sanitarias) para mejorar la comprensión de la enfermedad y dar a conocer los últimos adelantos de la investigación que apuntan al papel de la microbiota intestinal.
«Hay que ser positivo, pero continuar investigando».
Jennifer, una paciente con SII
Acerca del Biocodex Microbiota Institute
El Biocodex Microbiota Institute es un instituto científico internacional cuyo objetivo es la promoción de la salud a través de la comunicación sobre la microbiota humana. Para cumplir su misión, se dirige tanto a los profesionales sanitarios como al público general para mejorar la concienciación sobre el papel central de este órgano aún mal conocido.
Aunque la microbiota intestinal es la más conocida, no es la única: la microbiota vaginal también tiene un papel clave en nuestra salud. Pero, ¿qué saben las mujeres hoy en día sobre el papel de la microbiota vaginal? ¿Saben cómo cuidarla? ¿Qué papel tienen los profesionales sanitarios para informar a sus pacientes? Con el fin de dar respuesta a estas cuestiones, el Biocodex Microbiota Institute encargó a Ipsos que llevase a cabo un amplio estudio internacional al respecto: el Observatorio Internacional de las Microbiotas. Para ello, Ipsos encuestó a 6500 personas en 7 países (Francia, Portugal, España, EE. UU., Brasil, México y China). En cada país, la muestra encuestada era representativa de la población mayor de 18 años del país, en términos de género, edad, profesión, región y zona urbana.
3,433
Se entrevistó a mujeres
La encuesta se llevó a cabo por Internet del 21 de marzo al 7 de abril de 2023. Este estudio exclusivo revela una falta general de conocimientos sobre la contribución de la microbiota vaginal a la salud, y señala el papel esencial que tienen los profesionales sanitarios para enseñar a las pacientes, sobre todo a aquellas más mayores, sobre la importancia de la microbiota vaginal y las conductas que deben adoptar para cuidarla lo mejor posible.
La microbiota vaginal: un órgano poco conocido
El nivel de conocimientos sobre la microbiota vaginal es bastante bajo: tan solo 1 de cada 5 mujeres afirma saber exactamente qué significa el término «microbiota vaginal» (21 %, frente al 18 % de los resultados generales). El 53 % de las mujeres afirma no haber oído ese término jamás (frente al 55 % general).
Al preguntarles sobre el término «flora vaginal», los conocimientos siguen siendo superficiales: solo 1 de cada 2 mujeres sabe qué es con exactitud la flora vaginal (49 %), una proporción ligeramente más alta que en los resultados generales (40 %).
En cuanto al papel y la importancia de la microbiota en la salud, la mayoría de mujeres sabe que la microbiota vaginal funciona como una barrera que protege de microorganismos patógenos (67 %) y que la microbiota vaginal de cada persona es diferente (60%).
Sin embargo, solo 1 de cada 2 mujeres sabe que la vagina se limpia sola (52 %) y que, desde la infancia hasta la menopausia, la microbiota vaginal no permanece igual (52 %).
En cuanto a información concreta sobre el parto, la diversidad bacteriana o el desequilibrio de la microbiota, el nivel de conocimiento cae en picado: solo 1 de cada 3 mujeres sabe que las bacterias de la microbiota vaginal no son dañinas para la vagina (37 %) y que la vaginosis bacteriana está relacionada con un desequilibrio de la microbiota vaginal (35 %). 1 de cada 3 mujeres también sabe que el parto, ya sea vaginal o por cesárea, afecta a la microbiota intestinal del recién nacido (30 %). Solo el 27% sabe que la microbiota vaginal está equilibrada cuando su diversidad bacteriana es baja.
Conductas inadecuadas para proteger la microbiota vaginal
Las participantes obtuvieron una puntuación media relativamente baja (2,8/5) cuando se les hicieron preguntas para evaluar sus conocimientos sobre las conductas adecuadas que se deben adoptar para proteger la salud de su microbiota vaginal.
En concreto y exceptuando la ropa interior de algodón, en cuyo caso un 85 % de las mujeres adoptó una conducta adecuada, un porcentaje moderado de mujeres ha adoptado conductas específicas para proteger la salud de su microbiota vaginal.
Casi 1 de cada 2 mujeres afirma que se hace duchas vaginales (45 %) aunque perjudiquen a su microbiota vaginal.
Tan solo el 41 % declara que toma probióticos o prebióticos, ya sea por vía oral o vaginal.
Los médicos siguen proporcionando poca información, pero es muy necesaria
Menos de 1 de cada 2 mujeres afirma que su médico le ha explicado alguna vez cómo mantener una microbiota vaginal equilibrada (42 %, pero solo el 20 % ha recibido esta explicación más de una vez) o le ha informado sobre la importancia de conservar al máximo posible el equilibrio de su microbiota vaginal (40 %, pero solo el 18 % ha recibido esta información varias veces).
Por último, solo 1 de cada 3 dice que su médico le ha enseñado qué es la microbiota vaginal y para qué sirve (35 %, pero solo el 14 % ha recibido esta explicación varias veces).
Los médicos siguen proporcionando poca información sobre la microbiota, ¡pero las mujeres la necesitan! El 86 % de las mujeres encuestadas afirmaron que les gustaría recibir más información sobre la importancia de la microbiota vaginal y sobre su impacto en la salud.
Diferencias visibles según los perfiles de las encuestadas: las mujeres mayores de 60 años son quienes cuentan con menos conocimientos
Aunque tengan una edad en la que los problemas de salud relacionados con el envejecimiento estarán, para la mayoría de ellas, cada vez más presentes, las mujeres mayores de 60 años son quienes cuentan con menos conocimientos. Tan solo el 40 % de ellas sabe qué es la microbiota vaginal (en comparación con el 47 % de todas las mujeres).
Las mujeres mayores de 60 años suelen ser quienes saben menos sobre la microbiota vaginal, con una puntuación media de conocimientos de 3,3/8 (frente al 3,6/8 general). Por ejemplo, menos de 1 de cada 4 mujeres mayores de 60 años (23 %) sabe que la microbiota vaginal está equilibrada cuando su diversidad bacteriana es baja (frente al 27 % general).
En cuanto a la adopción de conductas adecuadas para mantener equilibrada la microbiota vaginal, las mujeres mayores de 60 años son, junto con las menores de 25 años, quienes han adoptado menos conductas adecuadas. Menos de 1 de cada 2 mujeres mayores de 60 años usa una solución limpiadora sin jabón (49 %, frente al 52 % general).
Al mismo tiempo, el grupo etario de mayores de 60 es el que menos suele hablar de este tema con los médicos. Tan solo 1 de cada 4 mujeres mayores de 60 años afirmó que su médico le había explicado qué es la microbiota vaginal y para qué sirve (29 %, frente al 35 % general).
Mientras que el 90 % del grupo de 35 a 44 años dijo que querría recibir más información por parte de sus profesionales sanitarios sobre la importancia de la microbiota vaginal y su impacto en la salud, solo el 79 % del grupo etario de más de 60 años querría obtener más información (frente al 86 % general).
Por otro lado, los grupos de 25 a 34 y 35 a 44 años tienen los mayores niveles de conocimiento sobre qué se necesita saber y hacer para conservar la microbiota vaginal.
Por ejemplo, al grupo de 35 a 44 años le suena mucho más que a otros el término «flora vaginal» (el 47 % sabe exactamente qué es, frente al 40 % general).
El grupo de 25 a 34 años es el que mejor informado está por sus médicos. Casi 1 de cada 2 mujeres recibieron explicaciones de su médico sobre qué es la microbiota vaginal y qué función tiene (48 % frente al 35 % general). Una amplia mayoría de mujeres del grupo de 25 a 34 años (56 % frente al 42 % general) dijo que había recibido información por parte de su médico sobre conductas adecuadas que adoptar para mantener una microbiota vaginal equilibrada.
El Observatorio Internacional de las Microbiotas también ha reportado sorprendentes contrastes entre países en cuanto a conocimientos, conductas e información proporcionada por los profesionales sanitarios.
Todos los resultados están disponibles en el sitio web del Biocodex Microbiota Institute:
El Biocodex Microbiota Institute es un centro de conocimiento internacional que tiene como objetivo fomentar una mejor salud mediante la difusión de información sobre la microbiota humana. Para ello, se dirige tanto a los profesionales sanitarios como al público en general para concienciar acerca del papel crucial de este órgano tan desconocido.
Aunque la microbiota intestinal es la más conocida, no es la única: la microbiota vaginal también tiene un papel clave en nuestra salud. Pero, ¿qué saben las mujeres hoy en día sobre el papel de la microbiota vaginal? ¿Saben cómo cuidarla? ¿Qué papel tienen los profesionales sanitarios para informar a sus pacientes? Con el fin de dar respuesta a estas cuestiones, el Biocodex Microbiota Institute encargó a Ipsos que llevase a cabo un amplio estudio internacional al respecto: el Observatorio Internacional de las Microbiotas. Para ello, Ipsos encuestó a 6500 personas en 7 países (Francia, Portugal, España, EE. UU., Brasil, México y China). En cada país, la muestra encuestada era representativa de la población mayor de 18 años del país, en términos de género, edad, profesión, región y zona urbana.
3,433
Se entrevistó a mujeres
La encuesta se llevó a cabo por Internet del 21 de marzo al 7 de abril de 2023. Este estudio exclusivo revela una falta general de conocimientos sobre la contribución de la microbiota vaginal a la salud, y señala el papel esencial que tienen los profesionales sanitarios para enseñar a las pacientes, sobre todo a aquellas más mayores, sobre la importancia de la microbiota vaginal y las conductas que deben adoptar para cuidarla lo mejor posible.
La microbiota vaginal: un órgano poco conocido
El nivel de conocimientos sobre la microbiota vaginal es bastante bajo: tan solo 1 de cada 5 mujeres afirma saber exactamente qué significa el término «microbiota vaginal» (21 %, frente al 18 % de los resultados generales). El 53 % de las mujeres afirma no haber oído ese término jamás (frente al 55 % general).
Al preguntarles sobre el término «flora vaginal», los conocimientos siguen siendo superficiales: solo 1 de cada 2 mujeres sabe qué es con exactitud la flora vaginal (49 %), una proporción ligeramente más alta que en los resultados generales (40 %).
En cuanto al papel y la importancia de la microbiota en la salud, la mayoría de mujeres sabe que la microbiota vaginal funciona como una barrera que protege de microorganismos patógenos (67 %) y que la microbiota vaginal de cada persona es diferente (60%).
Sin embargo, solo 1 de cada 2 mujeres sabe que la vagina se limpia sola (52 %) y que, desde la infancia hasta la menopausia, la microbiota vaginal no permanece igual (52 %).
En cuanto a información concreta sobre el parto, la diversidad bacteriana o el desequilibrio de la microbiota, el nivel de conocimiento cae en picado: solo 1 de cada 3 mujeres sabe que las bacterias de la microbiota vaginal no son dañinas para la vagina (37 %) y que la vaginosis bacteriana está relacionada con un desequilibrio de la microbiota vaginal (35 %). 1 de cada 3 mujeres también sabe que el parto, ya sea vaginal o por cesárea, afecta a la microbiota intestinal del recién nacido (30 %). Solo el 27% sabe que la microbiota vaginal está equilibrada cuando su diversidad bacteriana es baja.
Conductas inadecuadas para proteger la microbiota vaginal
Las participantes obtuvieron una puntuación media relativamente baja (2,8/5) cuando se les hicieron preguntas para evaluar sus conocimientos sobre las conductas adecuadas que se deben adoptar para proteger la salud de su microbiota vaginal.
En concreto y exceptuando la ropa interior de algodón, en cuyo caso un 85 % de las mujeres adoptó una conducta adecuada, un porcentaje moderado de mujeres ha adoptado conductas específicas para proteger la salud de su microbiota vaginal.
Casi 1 de cada 2 mujeres afirma que se hace duchas vaginales (45 %) aunque perjudiquen a su microbiota vaginal.
Tan solo el 41 % declara que toma probióticos o prebióticos, ya sea por vía oral o vaginal.
Los médicos siguen proporcionando poca información, pero es muy necesaria
Menos de 1 de cada 2 mujeres afirma que su médico le ha explicado alguna vez cómo mantener una microbiota vaginal equilibrada (42 %, pero solo el 20 % ha recibido esta explicación más de una vez) o le ha informado sobre la importancia de conservar al máximo posible el equilibrio de su microbiota vaginal (40 %, pero solo el 18 % ha recibido esta información varias veces).
Por último, solo 1 de cada 3 dice que su médico le ha enseñado qué es la microbiota vaginal y para qué sirve (35 %, pero solo el 14 % ha recibido esta explicación varias veces).
Los médicos siguen proporcionando poca información sobre la microbiota, ¡pero las mujeres la necesitan! El 86 % de las mujeres encuestadas afirmaron que les gustaría recibir más información sobre la importancia de la microbiota vaginal y sobre su impacto en la salud.
Diferencias visibles según los perfiles de las encuestadas: las mujeres mayores de 60 años son quienes cuentan con menos conocimientos
Aunque tengan una edad en la que los problemas de salud relacionados con el envejecimiento estarán, para la mayoría de ellas, cada vez más presentes, las mujeres mayores de 60 años son quienes cuentan con menos conocimientos. Tan solo el 40 % de ellas sabe qué es la microbiota vaginal (en comparación con el 47 % de todas las mujeres).
Las mujeres mayores de 60 años suelen ser quienes saben menos sobre la microbiota vaginal, con una puntuación media de conocimientos de 3,3/8 (frente al 3,6/8 general). Por ejemplo, menos de 1 de cada 4 mujeres mayores de 60 años (23 %) sabe que la microbiota vaginal está equilibrada cuando su diversidad bacteriana es baja (frente al 27 % general).
En cuanto a la adopción de conductas adecuadas para mantener equilibrada la microbiota vaginal, las mujeres mayores de 60 años son, junto con las menores de 25 años, quienes han adoptado menos conductas adecuadas. Menos de 1 de cada 2 mujeres mayores de 60 años usa una solución limpiadora sin jabón (49 %, frente al 52 % general).
Al mismo tiempo, el grupo etario de mayores de 60 es el que menos suele hablar de este tema con los médicos.Tan solo 1 de cada 4 mujeres mayores de 60 años afirmó que su médico le había explicado qué es la microbiota vaginal y para qué sirve (29 %, frente al 35 % general).
Mientras que el 90 % del grupo de 35 a 44 años dijo que querría recibir más información por parte de sus profesionales sanitarios sobre la importancia de la microbiota vaginal y su impacto en la salud, solo el 79 % del grupo etario de más de 60 años querría obtener más información (frente al 86 % general).
Por otro lado, los grupos de 25 a 34 y 35 a 44 años tienen los mayores niveles de conocimiento sobre qué se necesita saber y hacer para conservar la microbiota vaginal.
Por ejemplo, al grupo de 35 a 44 años le suena mucho más que a otros el término «flora vaginal» (el 47 % sabe exactamente qué es, frente al 40 % general).
El grupo de 25 a 34 años es el que mejor informado está por sus médicos. Casi 1 de cada 2 mujeres recibieron explicaciones de su médico sobre qué es la microbiota vaginal y qué función tiene (48 % frente al 35 % general). Una amplia mayoría de mujeres del grupo de 25 a 34 años (56 % frente al 42 % general) dijo que había recibido información por parte de su médico sobre conductas adecuadas que adoptar para mantener una microbiota vaginal equilibrada.
El Observatorio Internacional de las Microbiotas también ha reportado sorprendentes contrastes entre países en cuanto a conocimientos, conductas e información proporcionada por los profesionales sanitarios.
Todos los resultados están disponibles en el sitio web del Biocodex Microbiota Institute:
El Biocodex Microbiota Institute es un centro de conocimiento internacional que tiene como objetivo fomentar una mejor salud mediante la difusión de información sobre la microbiota humana. Para ello, se dirige tanto a los profesionales sanitarios como al público en general para concienciar acerca del papel crucial de este órgano tan desconocido.
¿Ha oído hablar del Día Mundial del Microbioma? ¡Es hoy! Cada año, el 27 de junio, todas las miradas se centran en los miles de millones de microorganismos que pueblan nuestro cuerpo... y en los nuevos avances médicos. El Día Mundial del Microbioma tiene como objetivo ayudar a los investigadores de todo el mundo a difundir la importancia de la microbiota en la salud. Para conmemorar este día tan especial, el Biocodex Microbiota Institute cede la palabra a una de las comunidades de investigación internacional más prometedoras: los ganadores de las subvenciones nacionales de la Biocodex Microbiota Foundation.
Es una relación de fidelidad. Por tercer año, el Biocodex Microbiota Institute celebra el Día Mundial del Microbioma con dos objetivos: sensibilizar al público general sobre la importancia de la microbiota y valorizar la investigación sobre la microbiota a través de los ganadores de las subvenciones nacionales de la Biocodex Microbiota Foundation.
Una mirada retrospectiva a las últimas investigaciones sobre microbiota premiadas por la Biocodex Microbiota Foundation
Son científicos, profesores, médicos especialistas en diferentes campos (gastroenterología, pediatría, neurología, cardiología, microbiología, farmacocinética…). Vienen de Portugal, Finlandia, Bélgica, México, Estados Unidos… Han realizado grandes avances en la comprensión del papel de la microbiota en la salud y las enfermedades asociadas… ¡Y todos han ganado la subvención nacional de la Biocodex Microbiota Foundation!
Desde 2017, la Biocodex Microbiota Foundation premia las iniciativas de investigación nacionales que tienen como objetivo comprender la interacción entre la microbiota y distintas enfermedades. En el Día Mundial del Microbioma 2022, con el fin de dar visibilidad a los investigadores, el Biocodex Microbiota Institute cede la palabra a los ganadores de las subvenciones nacionales mediante entrevistas dedicadas.
¿Qué les ha permitido hacer la subvención nacional de investigación de la Biocodex Microbiota Foundation? ¿Qué impacto tienen los resultados de sus investigaciones en la atención al paciente? Estos testimonios, disponibles en la sección dedicada al personal sanitario, nos dan una idea clara de la variedad y diversidad de proyectos de investigación en curso. Estas entrevistas se activarán a través de la cuenta de Twitter del Instituto durante 10 días y el LinkedIn de la Biocodex Microbiota Foundation el 27 de junio. ¡No dude en compartir y difundir las buenas nuevas!
Sobre el Biocodex Microbiota Institute
El Biocodex Microbiota Institute es un centro internacional de conocimiento no promocional dedicado a la microbiota. El Instituto instruye al público en general y a los profesionales de la salud sobre la importancia de la microbiota en la atención médica y el bienestar.
Sobre la Biocodex Microbiota Foundation
Desde 2017, la Biocodex Microbiota Foundation trabaja para mejorar la comprensión científica de la microbiota humana. Cada año, la Fundación contribuye a la financiación de la investigación mundial sobre microbiota a través de subvenciones otorgadas a proyectos de investigación científica innovadores. Regularmente se realizan convocatorias de proyectos sobre un tema específico relacionado con la microbiota y los proyectos más prometedores son seleccionados por un comité científico internacional compuesto por expertos independientes.
Contacto de prensa del Biocodex Microbiota Institute
Disbiosis, trastornos del humor, enfermedades neurodegenerativas, problemas psicomotores: las consecuencias potenciales de la exposición al glifosato no son nada despreciables, según una síntesis publicada por un equipo de investigadores polacos.
Adivinanza: soy el herbicida más utilizado del planeta. La OMS me considera cancerígeno probable. Sin embargo, la Unión Europea acaba de renovar mi autorización por 10 años más. ¿Quién soy?
Según un metanálisis que examinó las consecuencias de la exposición a esta molécula y a los herbicidas que la contienen, ejerce efectos «devastadores» sobre la microbiota y el cerebro. 2
Los franceses están muy expuestos al glifosato
Según un estudio realizado con 6848 voluntarios de 84 departamentos franceses, el porcentaje de exposición al glifosato es muy elevado. 3
Se encontraron trazas de este pesticida en los fluidos corporales del 99,8% de ellos, con una concentración media de 1,19 µg/L, diez veces superior al máximo autorizado en el agua potable. Los consumidores de productos orgánicos se ven menos afectados, mientras que los que beben agua del grifo, de fuentes o de pozos lo están más.
La concentración sanguínea es más elevada en primavera y en verano, que son las temporadas de esparcimiento del producto, y también en los hombres, los jóvenes y los agricultores, en especial los viticultores.
Grave alteración de las bacterias intestinales
Varios estudios realizados en animales demuestran, por ejemplo, que, incluso a dosis bajas, el glifosato aumenta la cantidad de bacterias patógenas intestinales, disminuye la de bacterias beneficiosas y altera considerablemente la abundancia relativa de dos grandes grupos bacterianos: Firmicutes y Bacteroidetes.
Se sabe que el mantenimiento de una relación adecuada entre Firmicutes y Bacteroidetes es un factor clave del equilibrio de la microbiota y que una variación de esta relación es un marcador de (sidenote:
Disbiosis
La disbiosis no es un fenómeno homogéneo ya que varía en función del estado de salud de cada individuo. Se define generalmente como una alteración de la composición y funcionamiento de la microbiota, provocada por un conjunto de factores ambientales y relacionados con el individuo, que alteran el ecosistema microbiano.
Levy M, Kolodziejczyk AA, Thaiss CA, et al. Dysbiosis and the immune system. Nat Rev Immunol. 2017;17(4):219-232.), un desequilibrio implicado en diferentes trastornos y enfermedades.
El glifosato desestabiliza también el eje intestino-cerebro conocido por su influencia no solo sobre el comportamiento, la memoria y las emociones, sino también sobre la inmunidad y las hormonas. Varios estudios indican que, en los roedores y los seres humanos, la exposición a este herbicida altera las bacterias intestinales implicadas en el eje intestino-cerebro, sobre todo las que desempeñan un papel beneficioso contra ciertos trastornos del humor.
Pero, por si esto fuera poco, el glifosato también afecta de manera significativa la barrera hematoencefálica (la membrana que protege el cerebro), alterando la formación y la supervivencia de las neuronas, así como la transmisión de los impulsos nerviosos. Esto podría tener consecuencias notables sobre:
Aunque este trabajo de síntesis plantea más preguntas que respuestas aporta, tiene el mérito de recalcar que todavía falta evaluar de manera más precisa el riesgo para la salud de la exposición al glifosato. Dado que este herbicida se utiliza todavía de manera masiva en numerosos países, se trata de un asunto de salud pública mundial.
Una fuerte tendencia a la desinformación se está desarrollando en TikTok, donde unos charlatanes afirman curar el intestino sin aportar ninguna prueba científica. En el presente artículo, Shania Bhopa explica cómo lidiar con la desinformación y proceder a un análisis crítico del contenido relacionado con la salud intestinal en las redes sociales.
La plaga de la desinformación no deja de expandirse. Por lo tanto, resulta primordial realizar un análisis crítico de la información sobre salud que se publica en plataformas como TikTok, especialmente en lo relativo a la microbiota intestinal. La microbiota intestinal, compuesta por billones de microorganismos, desempeña un papel fundamental en la digestión, el metabolismo, la función inmunitaria y la salud mental.
El hashtag #guthealth agrupa más de
540 000
videos en TikTok
5,5 millones
en Instagram
La desinformación puede ser especialmente perjudicial para las personas con dolencias como el síndrome del intestino irritable (SII) o enfermedades inflamatorias crónicas del intestino , ya que necesitan información exacta y respaldada por pruebas científicas para conseguir un control eficaz de los síntomas. La medicina factual garantiza que las intervenciones y los tratamientos se apoyen en pruebas científicas sólidas, con el fin de mejorar los resultados de los pacientes y optimizar la calidad de la asistencia sanitaria.
El objetivo es que las personas sean capaces de distinguir una información creíble de una mentira. Esto no solo ayudaría a mejorar el tratamiento de las afecciones intestinales, sino que también evitaría el riesgo de exacerbación de los síntomas causado por malos consejos.
En las redes sociales se abordan frecuentemente los siguientes temas. Nosotros hablaremos de las pruebas científicas.
Beber zumo de aloe vera a diario es bueno para el intestino y la microbiota intestinal
Las investigaciones sobre el zumo de aloe vera y sus efectos en la digestión han revelado beneficios potenciales. Se ha demostrado que el jugo de aloe vera consumido por vía oral proporciona una fuente útil de vitaminas y aminoácidos. 1 Sin embargo, por muy notables que sean los beneficios del aloe vera para la digestión, cabe reconocer que no representan más que un pequeño fragmento de la compleja ecuación que rige nuestra salud intestinal. Nuestro estilo de vida, nuestra dieta, nuestros niveles de estrés y otros factores ambientales tienen un impacto en la microbiota intestinal, de ahí la importancia de un enfoque holístico de la salud digestiva.
Beber zumo de remolacha permite que el cuerpo «elimine entre 3 y 4 kilos» de desechos
Las investigaciones indican que el zumo de remolacha podría ser beneficioso para el sistema digestivo debido a su alto contenido de moléculas bioactivas, antioxidantes y fibras. Las betalaínas y los compuestos fenólicos contenidos en el zumo de remolacha pueden modular positivamente la microbiota intestinal y promover la salud gastrointestinal, lo que lo convierte en una opción saludable para mejorar la función digestiva. 2
Mientras que muchas afirmaciones sensacionalistas publicadas en plataformas como TikTok, del estilo «beber zumo de remolacha permite eliminar entre 3 y 4 kilos de desechos» carecen de fundamento científico y caen en la desinformación, la verdad sobre la remolacha y la digestión se basa en su composición nutricional. De hecho, se ha descubierto que la presencia de betalaínas y compuestos fenólicos en el zumo de remolacha ejerce un impacto positivo en la microbiota intestinal y la salud gastrointestinal, lo que subraya el valor de la remolacha para promover la función digestiva. Por lo tanto, aunque no se sostienen muchas afirmaciones extravagantes sobre el zumo de remolacha, sus auténticos beneficios para la digestión ponen de relieve la importancia de incorporar en nuestra dieta estos alimentos ricos en nutrientes para mejorar nuestra salud intestinal y nuestro bienestar general.
Si no defecas después de cada comida... ¡estás ESTREÑIDO!
Según la Americana Gastroenterological Association, el estreñimiento se define por el hecho de tener menos de tres deposiciones en una semana, y no por el hecho de no defecar después de cada comida 3 Sin embargo, resulta importante señalar que la frecuencia normal de las deposiciones es muy variable de una persona a otra y que puede ir desde tres veces por semana hasta varias veces al día. La difusión de información falsa, como la afirmación de que no defecar después de cada comida equivale a tener estreñimiento, subraya la necesidad crítica de contar con información sobre salud basada en pruebas científicas.
Beber un chupito de zumo de limón, jengibre y miel en ayunas es bueno para la salud intestinal
Las investigaciones 4 indican que el extracto de jengibre puede tener efectos beneficiosos sobre la salud intestinal, en particular para mejorar la diarrea asociada a los antibióticos , restaurar la microbiota intestinal y mejorar el funcionamiento de la barrera intestinal. Sin embargo, cabe destacar que la mayor parte de estas pruebas proceden de ensayos con animales, cuyos resultados no siempre pueden transponerse directamente a la salud humana. Además, aunque los chupitos de jengibre no suelen ser peligrosos, un consumo excesivo puede provocar molestias gastrointestinales, como pirosis, diarrea o malestar estomacal.
No hay pruebas de que la frecuencia y la cantidad de chupitos de limón, jengibre y miel tengan algún efecto beneficioso sobre la microbiota intestinal.
Un zumo verde cada mañana es una pócima mágica para la microbiota intestinal
Las pruebas científicas indican que, por muchos beneficios nutricionales que aporte el zumo, su falta de fibra puede limitar su eficacia para facilitar la digestión. De hecho, la fibra es esencial para aumentar la masa fecal y acelerar el tránsito intestinal, contribuyendo a hacer más sano el proceso de digestión. Dado que los zumos suelen carecer de fibra, es probable que no ayuden eficazmente a la digestión en comparación con las frutas o verduras enteras que contienen fibras solubles e insolubles.
Además, aunque determinados zumos, como los de cítricos , pueden ofrecer algunos beneficios para la salud, también pueden irritar directamente la mucosa esofágica, con el riesgo de exacerbar los síntomas en las personas que padecen el síndrome del intestino irritable (SII), en cuyo caso no ayudan a la digestión 5
En resumen, aunque el zumo puede aportar ciertos beneficios nutricionales, su falta de fibra lo hace menos eficaz para favorecer la digestión que las frutas y verduras enteras. El consumo de alimentos enteros que contienen fibra natural sigue siendo esencial para la salud digestiva y el bienestar general.
¿Cómo obtener más información factual sobre la salud y proceder a un análisis crítico de lo que se publica en las redes sociales?
Distintas herramientas, como Consensus, You.com y ScholarAI, desempeñan un papel fundamental para descifrar la información sobre temas de salud. Estas herramientas no sólo agilizan el acceso a las pruebas científicas y su interpretación, sino que también capacitan a las personas para tomar las riendas de su propia salud, dotándolas de los conocimientos imprescindibles para tomar decisiones racionales y acertadas.
Según una revisión publicada recientemente en la revista Ecotoxicology and Environmental Safety, el glifosato altera gravemente el equilibrio de la microbiota intestinal, el eje intestino-cerebro y el sistema nervioso central y periférico.
El cerco se cierra alrededor del glifosato. Además de su clasificación como «cancerígeno probable» por parte del CIIC (Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer) —pero no de las agencias de regulación (véase el recuadro)— y de las sospechas de que es un perturbador endocrino, el glifosato también podría producir diversos trastornos del desarrollo y comportamiento neurológicos.
¿Por qué existe una controversia en torno a los efectos cancerígenos del glifosato?
Cancerígeno para el ser humano, pero autorizado para 10 años más en Europa. Esta paradoja es sorprendente. ¿Cómo explicar que el CIIC y la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) no tengan el mismo punto de vista sobre la toxicidad del glifosato? En primer lugar, porque la EFSA evaluó el poder cancerígeno del glifosato solo, mientras que el CIIC evaluó también la de los herbicidas a base de glifosato, es decir, del cóctel «glifosato + coadyuvantes». En segundo lugar, porque la EFSA incluyó ciertos datos reglamentarios, como los resultados de estudios de toxicidad realizados por los industriales, de los que el CIIC no dispone. Por último, porque las dos entidades no aplican los mismos criterios de interpretación de los resultados de los estudios toxicológicos; por ejemplo, el CIIC incluyó datos obtenidos en modelos de moluscos, reptiles o lombrices, mientras que la EFSA no suele incluir este tipo de datos en sus evaluaciones. 2
Al menos es lo que sugiere un análisis realizado por un equipo de investigadores belgas y polacos, que revisó los estudios sobre los efectos tóxicos del glifosato (experimentos en cultivos celulares y modelos animales, casos clínicos, estudios epidemiológicos, etc.). 1
Varios estudios científicos en animales demostraron que la exposición prolongada a herbicidas a base de glifosato produce una modificación de la composición de la microbiota intestinal en favor de las bacterias patógenas.
El análisis del ARNr de 16S de 141 familias bacterianas permitió demostrar una desviación de la relación Firmicutes/Bacteroidetes, un marcador significativo de (sidenote:
Disbiosis
La disbiosis no es un fenómeno homogéneo ya que varía en función del estado de salud de cada individuo. Se define generalmente como una alteración de la composición y funcionamiento de la microbiota, provocada por un conjunto de factores ambientales y relacionados con el individuo, que alteran el ecosistema microbiano.
Levy M, Kolodziejczyk AA, Thaiss CA, et al. Dysbiosis and the immune system. Nat Rev Immunol. 2017;17(4):219-232.), así como una disminución de la abundancia de bacterias beneficiosas, como los géneros Enterococcus y Bacillus. Por otra parte, ciertas bacterias patógenas, como E. coli y las especies de los géneros Salmonella y Clostridia, se volvieron resistentes al glifosato como consecuencia de esta exposición.
En los estudios, estas modificaciones de la microbiota se asociaron a un aumento del estrés oxidativo y de los niveles de inflamación. La exposición al glifosato también podría causar cambios anatómicos en el yeyuno y el duodeno.
Eje intestino-cerebro
Al desestabilizar la microbiota intestinal, los herbicidas que contienen glifosato parecen tener la capacidad de alterar el funcionamiento del eje intestino-cerebro, mediado por el nervio vago, así como del eje hipotálamo-hipofisario. Esto podría producir disfunciones neuronales y endocrinas y, por lo tanto, múltiples consecuencias hormonales, emocionales, cognitivas o comportamentales.
El glifosato puede producir diversas alteraciones neuronales relacionadas o no con la microbiota y el eje intestino-cerebro. Se sabe que las personas fuertemente expuestas (agricultores y trabajadores de las fábricas químicas) tienen un mayor riesgo de enfermedades neurodegenerativas. Estas enfermedades podrían tener relación con una disminución de las proyecciones axónicas de las neuronas y con una degeneración de la vaina de mielina de los nervios motores y sensoriales causadas por el glifosato. También parece que este herbicida inhibe la diferenciación y el crecimiento neuronal, provocando la desaparición de ciertas ramificaciones axónicas y un menor desarrollo dendrítico, que pueden producir discapacidades neuromusculares y locomotoras.
Barrera hematoencefálica (BHE)
La BHE es una membrana semipermeable que regula el transporte de moléculas, células inmunitarias, xenobióticos y patógenos entre los vasos sanguíneos y el microentorno del sistema nervioso central, contribuyendo así a la señalización paracrina y endocrina. En cocultivos de células endoteliales y neuronas (un modelo de investigación de la BHE), la exposición al glifosato durante 24 horas produjo diferentes efectos dañinos, en especial la disminución de las proteínas de las uniones estrechas, el aumento de la permeabilidad vascular y la alteración de la actividad de las neuronas.
Glifosato: Europa condenada a 10 años más
El 16 de noviembre de 2023, tras el voto de los veintisiete, la Comisión Europea decidió renovar la autorización del glifosato por un periodo de 10 años. ¿Por qué autorizar, y durante un periodo tan largo, un herbicida tan controvertido? Simplemente porque los Estados miembros no consiguieron ponerse de acuerdo. En la votación, 7 países —entre ellos Francia, Alemania e Italia— se abstuvieron, 3 se opusieron y 17 votaron a favor, en particular España y Portugal. Esta propuesta de renovación se basa en las conclusiones de un informe de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) que data de julio de 2023. Aunque reconoce una falta de datos, la agencia afirma que no existe motivo de preocupación crítica para el ser humano, el medio ambiente o los animales que justifique la prohibición del glifosato. 3
Comunicación nerviosa
El glifosato, como todas las sustancias organofosforadas, inhibe la enzima acetilcolinesterasa, lo cual podría conducir a parálisis, trastornos de la memoria, alteraciones psicomotoras y ansiedad.
Un estudio realizado en adolescentes andinos que vivían en regiones agrícolas reveló una correlación entre los marcadores de la acetilcolinesterasa y la depresión. Los herbicidas a base de glifosato también podrían alterar la transmisión monoaminérgica relacionada con la depresión mayor.
Estos resultados son inquietantes porque el glifosato está omnipresente en el aire, en el agua y en los alimentos. Nos afecta a todos, aunque los agricultores y los trabajadores de las fábricas de herbicidas son los más expuestos. ¿A qué dosis diaria pueden aparecer efectos sobre el cerebro y la microbiota del ser humano? ¿Cuáles son las vías de exposición que producen un mayor impacto? ¿Qué franjas de edad son más sensibles? Este estudio plantea muchas preguntas y será necesario realizar muchos otros para responderlas.
¿Ha oído hablar del Día Mundial del Microbioma? ¡Es hoy! Cada año, el 27 de junio, todas las miradas se centran en los miles de millones de microorganismos que pueblan nuestro cuerpo... y en los nuevos avances médicos. El Día Mundial del Microbioma tiene como objetivo ayudar a los investigadores de todo el mundo a difundir la importancia de la microbiota en la salud. Para conmemorar este día tan especial, el Biocodex Microbiota Institute cede la palabra a una de las comunidades de investigación internacional más prometedoras: los ganadores de las subvenciones nacionales de la Biocodex Microbiota Foundation.
Es una relación de fidelidad. Por tercer año, el Biocodex Microbiota Institute celebra el Día Mundial del Microbioma con dos objetivos: sensibilizar al público general sobre la importancia de la microbiota y valorizar la investigación sobre la microbiota a través de los ganadores de las subvenciones nacionales de la Biocodex Microbiota Foundation.
Una mirada retrospectiva a las últimas investigaciones sobre microbiota premiadas por la Biocodex Microbiota Foundation
Son científicos, profesores, médicos especialistas en diferentes campos (gastroenterología, pediatría, neurología, cardiología, microbiología, farmacocinética…). Vienen de Portugal, Finlandia, Bélgica, México, Estados Unidos… Han realizado grandes avances en la comprensión del papel de la microbiota en la salud y las enfermedades asociadas… ¡Y todos han ganado la subvención nacional de la Biocodex Microbiota Foundation!
Desde 2017, la Biocodex Microbiota Foundation premia las iniciativas de investigación nacionales que tienen como objetivo comprender la interacción entre la microbiota y distintas enfermedades. En el Día Mundial del Microbioma 2022, con el fin de dar visibilidad a los investigadores, el Biocodex Microbiota Institute cede la palabra a los ganadores de las subvenciones nacionales mediante entrevistas dedicadas.
¿Qué les ha permitido hacer la subvención nacional de investigación de la Biocodex Microbiota Foundation? ¿Qué impacto tienen los resultados de sus investigaciones en la atención al paciente? Estos testimonios, disponibles en la sección dedicada al personal sanitario, nos dan una idea clara de la variedad y diversidad de proyectos de investigación en curso. Estas entrevistas se activarán a través de la cuenta de Twitter del Instituto durante 10 días y el LinkedIn de la Biocodex Microbiota Foundation el 27 de junio. ¡No dude en compartir y difundir las buenas nuevas!
Sobre el Biocodex Microbiota Institute
El Biocodex Microbiota Institute es un centro internacional de conocimiento no promocional dedicado a la microbiota. El Instituto instruye al público en general y a los profesionales de la salud sobre la importancia de la microbiota en la atención médica y el bienestar.
Sobre la Biocodex Microbiota Foundation
Desde 2017, la Biocodex Microbiota Foundation trabaja para mejorar la comprensión científica de la microbiota humana. Cada año, la Fundación contribuye a la financiación de la investigación mundial sobre microbiota a través de subvenciones otorgadas a proyectos de investigación científica innovadores. Regularmente se realizan convocatorias de proyectos sobre un tema específico relacionado con la microbiota y los proyectos más prometedores son seleccionados por un comité científico internacional compuesto por expertos independientes.
Contacto de prensa del Biocodex Microbiota Institute
Piel, tránsito intestinal, articulaciones…: cada fuente termal tiene sus virtudes. Porque la lista de los beneficios, aunque específica de cada fuente, a menudo es larga. ¿Cómo se explica este baño de juventud? ¿A través del efecto de las curas sobre la microbiota digestiva?
Cuando lea los resultados de este estudio, ya no verá con los mismos ojos su estancia en el balneario. En efecto, aunque reserve una estancia para una persona, no será el único que se beneficie: ¡los millones de bacterias de la microbiota intestinal que viven en su tubo digestivo también la disfrutarán!
Este es el resultado de un estudio realizado en Japón, un país donde los (sidenote:
Onsen
Fuentes de agua caliente.
) son un auténtico arte de vivir. Se les atribuyen numerosas virtudes para diversos males: trastornos del sueño, trastornos osteomusculares, enfermedades de la piel, enfermedades cardiovasculares, hipertensión, tránsito intestinal…
Para que la ciencia pueda saber más, 136 valientes adultos sanos (80 hombres y 56 mujeres) aceptaron ser los (afortunados) conejillos de Indias de un experimento.
Programa: al menos 20 minutos de baño diario en una fuente caliente elegida por sus propiedades durante 7 días consecutivos, en Beppu, la ciudad de las 2000 fuentes.
Resultado después de una semana de termalismo: la microbiota intestinal de los agüistas que eligieron fuentes calientes ricas en bicarbonato mostró una abundancia considerablemente mayor de una bacteria llamada Bifidobacteriumbifidum; la de los agüistas que optaron por aguas sulfurosas un aumento de Ruminococcus2 y Alistipes; y por último, la microbiota de los agüistas que se decidieron por aguas simples (sin ningún mineral especialmente abundante) presentaron un aumento de la población intestinal de Parabacteroides y Oscillibacter.
La bacteria Bifidobacteriumbifidum se reconoce de manera generalizada como una «bacteria buena» (efectos beneficiosos sobre el estreñimiento, la función inmunitaria etc.), por lo que sería tentador concluir que esta bacteria explica los «poderes» de la balneoterapia. Pero solo es más abundante en las aguas ricas en bicarbonato. Y este efecto varía de un onsen bicarbonatado a otro. Peor aún, los microorganismos que se ven favorecidos con motivo del termalismo en aguas sulfurosas o en aguas simples se conocen por unos efectos a veces beneficiosos y a veces dañinos.
En resumen, la única conclusión a la que se puede llegar es que ciertas curas termales ejercen un efecto potencial sobre la microbiota intestinal. Pero ¿el efecto se debe solo a la composición del agua, a los 20 minutos a 25 grados, a la relajación que proporciona, al centro elegido por el voluntario (elección que puede verse influenciada por su clase social o su barrio) o incluso al simple hecho de que los conejillos de Indias modificaron involuntariamente sus costumbres, evitando, por ejemplo, pequeños extras alimentarios? Para esclarecerlo, se necesitan otros experimentos. Porque, en el estado actual de los conocimientos, la conclusión no es tan clara como el agua…